lunes, 15 de octubre de 2018

16 de octubre, Día Mundial de la Alimentación: tradiciones y calabaza en tacha



Autora: Ana Luisa Nerio Monroy

La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés), fue fundada el 16 de octubre de 1945 y por ello, esta fecha se celebra cada año el Día Mundial de la Alimentación. La alimentación es un derecho humano básico, indispensable para la vida humana. 

Es un derecho “complejo” porque en él convergen una gran cantidad de aspectos o componentes, sin los que no podría entenderse su trascendencia más allá de la ingesta de minerales, proteínas, vitaminas y otros nutrientes que el organismo humano necesita.

La alimentación debe ser suficiente en cantidad, de calidad, inocua (que no nos haga daño), accesible económica y físicamente y culturalmente aceptable.  Sobre este último componente me voy a centrar. ¿Puede acaso una mexicana o un mexicano no pensar en comida y la muy variada y rica cocina mexicana? Por supuesto que nos hace total sentido hablar de alimentación y cultura tomando en cuenta que en nuestro país la comida es parte fundamental de las tradiciones, saberes y formas de vida, de quienes habitan los distintos estados que componen la República Mexicana.







La comida, los alimentos, las especies, los olores, sabores y colores forman parte de la cultura del país y de nuestra propia historia de vida. ¿Cuántas recetas de familia pasan de generación en generación? ¿Quién de ustedes tiene en la memoria ese platillo que sólo su abuela, abuelo, tía, tío, mamá, papá, hermana sabe hacer de manera tan única y deliciosa?

En este Día Mundial de la Alimentación celebro su componente cultural compartiendo una receta familiar. La calabaza en tacha (dulce) de mi mamá, receta que además viene muy a cuento en estos días próximos a la celebración de Día de Muertos.

Calabaza en tacha (dulce).

1 kilo de calabaza de Castilla en pedazos medianos/ ¼ de piloncillo/ 1 taza Agua/ 4 Rajas de canela/ 2 clavos de olor.

Se cuece la calabaza en una olla o cacerola con una taza de agua, ( no más de una taza pues la calabaza suelta muchísima agua y queremos que el dulce quede espeso); se agrega, el piloncillo, la canela y los 2 clavos de olor, (no más de 2 o se amarga). Se pone al fuego y una vez que suelte el primer hervor se pone baja el fuego bajito y se deja cocer durante 30 minutos. Revisar que este bien cocida. ¡Listo! Se sirve como postre.

@aluisanerio

jueves, 11 de octubre de 2018

11 de octubre Día Internacional de la Niña, violaciones a sus derechos en México (2018)




Autora: Ana Luisa Nerio Monroy


No es casual que la lucha por la igualdad de género y la prevención y eliminación de la violencia en contra las mujeres sea un tema de preocupación mundial ya que en todos los grupos de población: personas con discapacidad, personas mayores, migrantes, indígenas, refugiados, desaparecidos, población LGBTTI, etcétera, hay mujeres.


Y son las mujeres las que dentro de esos grupos de la población suelen ser las que a causa del sistema patriarcal y todo lo que éste implica con su machismo y misoginia, enfrentan más obstáculos ejercer y gozar de todos sus derechos.


Peor aún, si se trata de las niñas pues aún no se ha superado la visión adultocéntrica que trata a las niñas y niños como propiedad de las personas adultas y que no les reconoce derechos más allá de los que “la sabiduría de los años decide darles”. Si se suma a la edad el asunto del género, tenemos una combinación alejada de un enfoque de derechos de la infancia que coloca a las niñas en situaciones de gran vulnerabilidad.


Se considera que la niñez va de los cero a los 18 años. En México la Encuesta Intercensal 2015 señala que residen 39.2 millones de niñas, niños y adolescentes de 0 a 17 años, lo que representa 32.8% de la población total. Aproximadamente la mitad de esa población son niñas. Es decir, en México hay cerca de 20 millones de niñas que se enfrentan a diversas problemáticas y obstáculos para el goce y ejercicio pleno de sus derechos humanos.


Por ejemplo, la Fundación para la Justicia y el Estado de Democrático de Derecho señaló, hace algunas semanas que, de los 5 mil 452 menores desaparecidos, 3 mil 217 son niñas y 2 mil 235 niños. (Datos del Registro Nacional de Personas Desaparecidas)[1]. ¡Más de 3 mil niñas! Niñas cuyas familias viven en la desesperación y dolor de no saber dónde están. La desaparición de estas niñas puede tener diversas explicaciones: crimen organizado, trata de personas, explotación sexual, explotación laboral, tráfico de personas, violencia de género. Por su edad o grado de madurez, así como por su condición de mujeres, las niñas son un grupo en situación de mayor vulnerabilidad dentro de las propias mujeres. Ante esta problemática, como en muchas otras, poco ha hecho el Estado Mexicano o lo que ha realizado no ha resultado realmente efectivo.  


Otro ejemplo, y tema de verdadera alarma en nuestro país es el de embarazos en niñas y adolescentes. La organización IPAS señala en un estudio presentado este año (100% recomendable su lectura)[2], que en 2016 México registraba más de 11 mil nacimientos en niñas entre 10 y 14 años. Cifra tras de la que se pueden ocultar muchísimos casos de violencia sexual. ¿Puede alguien imaginar a una niña de 10 años teniendo relaciones sexuales de manera consiente y consentida? Yo definitivamente no.






Un embarazo durante la adolescencia conlleva diversos riesgos para la vida y salud de madres, hijos o hijas. Asimismo, el proyecto de vida de la joven se ve obstaculizado. Un gran número de madres adolescentes no continúan o no concluyen sus estudios y esto repercute en otros de sus derechos como la salud, el trabajo y una vida libre de violencia.


Este 11 de octubre, Día Internacional de la Niña es una fecha para reconocer la enorme cantidad de violaciones a los derechos humanos que millones de niñas viven en todo el mundo. Exigir el respeto a sus derechos, no callar ante las injusticias; cambiar la forma en que educamos a niñas y niños puede contribuir a que no haya niñas sin acceso a la educación, a la salud, o a una vida libre de violencia. #LasNiñasTambiénCuentan





@aluisanerio







[1] Sin Embargo, La cifra del horror: 3,217 niñas y 2,235 niños desaparecidos en 10 años en México; 70%, con Peña en http://www.sinembargo.mx/30-04-2018/3413470
[2] IPAS, Violencia sexual y embarazo infantil en México. Un problema de salud pública y de derechos humanos. https://www.ipasmexico.org/wp-content/uploads/2018/06/Brochure%20Violencia%20Sexual%20y%20Embarazo%20Infantil%20en%20Me%CC%81xico,%20un%20problema%20de%20salud%20pu%CC%81blica%20y%20derechos%20humanos.pdf